Es el tercer país con mayor presencia de “actores criminales”, e incluye a funcionarios
Honduras es el décimo país más afectado por la criminalidad en el mundo y el tercero a nivel latinoamericano, según el Índice Global de Crimen Organizado 2021. En la región sólo es superado por Colombia y México.
Este índice, desarrollado por la Iniciativa Global Contra la Delincuencia Organizada Transnacional (GI-TOC por sus siglas en inglés), evalúa los niveles de criminalidad y resiliencia en los 193 estados miembros de la ONU.
Lo pondera de acuerdo con dos métricas: según su criminalidad y según su resiliencia al crimen organizado. En ambos casos, el índice los califica con una puntuación de 1 a 10.
Es así que el país con mayor criminalidad mundial lo tiene la República Democrática del Congo con un puntaje de 7,75 sobre 10, le sigue Colombia, Myanmar, México y Nigeria. Honduras ocupa la posición 10 con un puntaje de 6.98.
El índice basa el puntaje de la criminalidad en un país de acuerdo con dos variables, el mercado criminal y los actores criminales.
Los resultados, que se basan en un conjunto de datos completo informado por expertos en todo el mundo, pintan una imagen preocupante del alcance, la escala y el impacto de crimen.
Es un pensamiento aleccionador, por ejemplo, que casi el 80% de la población mundial actual vive en países con altos niveles de criminalidad.
Es igualmente alarmante considerar que la explotación de personas, en forma de seres humanos tráfico, se ha convertido en la economía criminal más generalizada del mundo, una desarrollo que sirve como un recordatorio oscuro del impacto deshumanizador de crimen organizado.
Dramática posición de Honduras
El ranking especifica que Honduras es uno de los países donde hay mayores centros de trata de personas y donde más cocaína se exporta al mundo, lo que está íntimamente ligado con las causas de la violencia y el conflicto en el país. Honduras recibe una calificación de 7,5 sobre 10 en el tráfico de cocaína y marihuana.
Frente al impacto del tráfico de drogas , el director de GI-TOC, Mark Shaw, aseguró que “si miras a Latinoamérica, por supuesto, puedes ver el impacto que tiene el tráfico de drogas en toda esa región, en particular y si desglosas los puntajes por subregión, también puedes ver el impacto en América Central”.
Shaw también se refirió a la forma como los gobierno combaten el consumo de drogas: “en torno a si debe continuar la guerra contra las drogas, creo que la respuesta y según el consenso mundial cada vez mayor es que no ¿eso significa automáticamente que hay soluciones fáciles para reducir las ganancias que los grupos criminales obtienen de las drogas? Creo que vale la pena discutirlo y lo que hace Global Initiative es proporcionar una plataforma para muchas de esas discusiones”, aseguró Shaw.
Presencia de actores criminales
Además, en el ítem de los actores criminales Honduras alcanzó un puntaje de 8,25 sobre 10, el tercer lugar en el mundo y el primero en Latinoamérica.
“En grupos estilo mafia tiene un 8,5; en redes criminales obtuvo 8 puntos y un 8,5 sobre 10 en actores integrados por el Estado, y 8 puntos en actores criminales extranjeros”, indica el informe de la ONU.
“Honduras ilustra la potencia del crimen actores. grupos como Mara Salvatrucha 13 dominar el panorama criminal del país, dedicándose a la extorsión, el tráfico de drogas y distribución y blanqueo de capitales. Junto a tales grupos, redes criminales como ‘Los tumbadores’ se parecen a los piratas, que roban y revenden envíos de drogas, en gran parte a lo largo de rutas de contrabando de personas”, señala el informe.
Estas actividades criminales también son facilitados por actores integrados por el estado como organizaciones criminales extranjeras, especialmente de Colombia y México.
El aporte del Gobierno en la lucha contra la criminalidad tiene bajos puntajes en todas sus áreas.
Otra de las conclusiones a las que llega el informe de Global Initiative es que los estados costeros tienen el puntaje promedio de criminalidad más alto y una de las posibles explicaciones más obvias es el acceso al comercio y la infraestructura marítima internacional.