El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI), de referencia para Honduras, cerró este lunes con una fuerte caída del 4,48% y se situó en 67.12 dólares el barril para julio, -3,05 dólares, su nivel más bajo desde mitad de marzo. El barril Brent bajó 4,06%.
La baja de precios ocurre antes de la reunión de la Reserva Federal de Estados Unidos, mientras los inversores trataban de calibrar su apetito por nuevas subidas de tasas de interés y en medio de la preocupación por las perspectivas de la demanda china y el aumento de la oferta rusa.
Francisco Blanch, de Bank of America Global Research, dijo: “Los precios del petróleo están atrapados en un choque entre dos fuerzas opuestas: los bajistas que apuntan a una contracción monetaria y los alcistas que esperan menores inventarios en el segundo semestre. Los bajistas mantendrán la ventaja por ahora, ya que los precios del petróleo tendrán dificultades para subir hasta que la FED relaje la oferta monetaria.”
Bank of America Global Research sigue esperando que el precio del Brent en 2023 se sitúe en torno a los 80 dólares por barril.
Para el analista Tom Essaye, de la firma Sevens Report, el efecto alcista que tuvo el reciente anuncio de Arabia Saudí de recortar su producción ha tenido muy poco recorrido. Los inversores cambiaron de estrategia este lunes, ya que el recorte de Arabia Saudita solo eliminará un tercio de la demanda mundial de petróleo de 1 solo día en el transcurso de todo el mes de julio, lo que no afectará significativamente la dinámica de la oferta y la demanda.
Las subidas de tasas de la FED han fortalecido el dólar, encareciendo las materias primas denominadas en dólares para los tenedores de otras divisas y lastrando los precios.