El porcentaje de las pérdidas de energía eléctrica en Honduras es el más alto de la región centroamericana, según el último informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) con estadísticas del subsector eléctrico de los países del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA).
Las cifras a 2017, señalan que en Honduras las pérdidas alcanzaron 36%, mientras que en Nicaragua fue de 21,6%, Guatemala de 17,1%, Panamá fue de 13,6%, El Salvador, 11,5% y Costa Rica es el más bajo con 10,9% según CEPAL.
Para Kevin Rodríguez, director ejecutivo de la Asociación de Productores de Energía (AHPEE), la cifra es alarmante ya que en la ENEE, la distribución se ha estado manejando en promedios de un 31,2% a 35,2% de pérdidas.
“En algunos casos, triplicamos el porcentaje de países como Costa Rica y El Salvador, y duplicamos a Guatemala en las pérdidas, entonces ese es un problema que solventar a la brevedad posible”, destacó.
Cuando se hacen cálculos del 2002 a marzo del 2019, las pérdidas de electricidad que exceden al 15% que se reconocen como parte del costo del suministro, el valor acumulado en dinero es más de 56 mil millones de lempiras.
“Esto está afectando las finanzas estatales, no solamente la ENEE, sino que del Estado porque son recursos que se tiene que ver de dónde se sacan para poder solventar la crisis”, agregó Rodríguez.
El documento de la Cepal precisa que las pérdidas del sector de la energía eléctrica se calculan a partir de la generación neta entregada por los productores en las redes de alta y media tensión y la energía vendida a los consumidores finales.
Las pérdidas eléctricas totales reflejan la suma de las pérdidas en los segmentos de la transmisión y la distribución.
Cuando se exceden el 15% se traducen en pérdidas financieras directas y eso es lo que ha pasado en Honduras, explica el directivo.
“No es posible salir de la crisis financiera, por lo que es el principal reto que debe enfrentarse para sacar adelante al sector eléctrico”, según Rodríguez que retoma comentarios de la Cepal.