Miguel Pon, director rjecutivo de la Asociación de Exportadores de Café de Honduras (Adecafeh), propuso una revisión al programa de retención que se hace a los productores del grano.
Señaló que el problema de precios del mercado internacional, con niveles de 100 y 105 dólares por saco, no está generando ningún tipo de utilidad a los productores de café y eso afecta a toda la cadena caficultora.
El problema es que los productores tienen cuentas pendientes con la banca privada y estatal y las retenciones se hacen para garantizar los pagos.
Además está pendiente el desembolso de 1.900 millones de lempiras de un fideicomiso aprobado pro el gobierno y sujeto a una nueva retención.
“El problema principal aquí se trata con aquellos productores que no tienen deudas, ni con la banca ni con las instituciones cafeteras, pero se les está haciendo esta retención de 10.50 dólares y eso está afectando seriamente los ingresos del productor”, denunció el exportador.
Agregó que estos cobros los están llevando a perder actualmente hasta 25 dólares por quintal, tomando en cuenta el precio internacional y las retenciones.
Pon señala que el mecanismo establecido para las retenciones debe modificarse y solo aplicar las mismas con los productores que solicitaron créditos como “ocurre con todo préstamo normalmente”.
“Yo creo que si es factible y necesario que todos los sectores que conformamos la cadena nos reunamos y analicemos cuáles son esos esquemas que podemos implementar para aliviar un poco lo que es el ingreso del productor de café”, opinó.
Actualmente los exportadores, al momento de la compra de la producción, retienen 13.25 dólares por cada quintal.
De este monto, 2.75 dólares son para las instituciones cafeteras y 9.50 dólares para el fideicomiso cafetero y 1.50 dólares para el último préstamo que solicitó el Ihcafé a un banco privado para dar 200 lempiras por quintal a cada productor.