El sólido impulso de contratación en Estados Unidos continuó en febrero y el crecimiento de los salarios se desaceleró, lo que se sumó a las presiones inflacionarias que ya están afectando a la economía y preparando a la Reserva Federal para aumentar las tasas de interés este mes.
Las nóminas no agrícolas aumentaron en 678.000 el mes pasado después de una ganancia revisada al alza de 481.000 en enero, según datos del Departamento del Trabajo publicados el viernes. La tasa de desempleo bajó hasta el 3,8%, y el ingreso por hora promedio se mantuvo sin cambios con respecto al mes anterior.
La estimación media de una encuesta de Bloomberg de economistas era de un incremento de 423.000 en las nóminas y que la tasa de desempleo cayera al 3,9%.
El informe de empleo, el último que recibirá la Reserva Federal antes de su reunión del 15 y 16 de marzo, destaca un mercado laboral en constante mejora, aunque extremadamente ajustado.
Si bien es probable que la disminución de los casos de covid-19 y la flexibilización de restricciones ayudaron a impulsar la contratación, los empleadores aún luchan por llenar una cantidad casi récord de vacantes, lo que dificulta satisfacer la resistente demanda tanto de los hogares como de las empresas.