El gigante inmobiliario chino reportó deudas por más de $300.000 millones, lo que tiene un efecto directo en más de 200 bancos y entidades no bancarizadas. Este jueves, después de tres años de problemas de deuda, el Grupo solicitó la protección por bancarrota del capítulo 15 en los Estados Unidos, según mostraron documentos judiciales.
Lo último que se reportó desde el Grupo chino es que supuestamente habría entrado en un proceso de reestructuración de deuda con las autoridades chinas que planeaban incluir la venta de algunos de los activos personales de su fundador.
Desde 2021, esta situación habría puesto en duda a los inversionistas sobre el posible inicio de la ruptura de una burbuja inmobiliaria en China, que podría tener grandes repercusiones en el sistema financiero mundial y que también podría impactar los mercados emergentes.
En cifras, la deuda por intereses, a 2021, alcanzaba los $122.000 millones.
El macro problema es el apalancamiento de la economía china, que se relaciona con una estructura de falta de ahorro con la misma, y entonces los excesos o los ahorros de los hogares se canalizaron a través de vehículos como Evergrande, estiman economistas.