La construcción pública está semiparalizada debido al retraso en los pagos en especial de Inversiones Estratégica de Honduras (Invest H), ente creado con la iniciativa estadounidense Cuenta del Milenio, que adeuda 1.100 millones de lempiras.
Las deudas totales, de otras instituciones públicas, elevan la cifra a más de “1.450 millones de lempiras”, reclamó Silvio Larios, Director Ejecutivo de la Cámara Hondureña de la Industria de la Construcción (CHICO).
“Estamos hablando de deudas de varias instituciones, pero en el caso de INVEST-H, sí podemos decir que sólo empresas constructoras asciende cerca de 840 millones más lo que se les adeuda a las empresas supervisoras o consultoras, son otros 240 millones, o sea, estamos llegando cerca de 1.100 millones (1.080 millones). También en INSEP y en SEDECOAS, y la sumatoria de todos estos proyectos en todas las instituciones, bien podría alcanzar alrededor de los 1,400 o 1,450 millones de lempiras”, declaró.
Para el empresario la situación es aguda y algunos proyectos de Invest H “ya están en etapa de suspenso, el peligro o el riesgo que corre con estos que estaban en ejecución, es precisamente que las obras se van a deteriorar y van a requerir de mayor inversión para poder alcanzar el 100% del proyecto”, advirtió.
“Hay comunidades que están bastante preocupadas, por así decirlo, en el sentido que si se van a continuar los trabajos o no, comunidades como un el lado de occidente, en Copán, en el cual podríamos decir allá en la zona de San Nicolás, El Rosario, San Pedrito, El Naranjo, consiste un proyecto de 33 kilómetros”, apuntó.
El período de transición de Gobierno es normal y prudente para revisar los proyectos, dijo, pero creemos nosotros que ya el período para este proceso ha sido más que suficiente, hemos estado en comunicación constante con las autoridades que están a cargo de ahora de INVEST-H, la gente de INSEP, en el cual se nos ha manifestado que sí están trabajando de manera intensa para poder honrar los pagos pendientes.
El tema se analizaría en Consejo de Ministro, espera Larios.
