Honduras y El Salvador con los peores pronósticos
La economía regional en 2020 se contraería hasta en un -6.8% en 2020, alcanzando un valor incluso más crítico tomando como referencia la experiencia de la crisis económica de 2008-2009.
Para 2021 la economía regional retomaría el crecimiento positivo con una variación de 2%, de acuerdo a las proyecciones que publicó la Secretaría de Integración Económica Centroamericana (SIECA) en su informe regional, bajo la coordinación de Jorge Espinoza y Jorge Madrigal.
La región incluye a Centroamérica, Panamá y República Dominicana (CAPRD), y presenta datos que van de -1% (Dominicana) a -8,5% (El Salvador). Honduras proyecta entre -7 y -8%, que es el dato del BCH.
Estas estimaciones no tienen precedente en la historia reciente de la
región y reflejan tanto el alto grado de incertidumbre en relación con el desempeño de la economía global como los efectos de las medidas de confinamiento y distanciamiento social que se han implementado para prevenir la expansión del Covid-19.
“Los efectos en el corto, mediano y largo plazo, dependerán de la magnitud y duración de las medidas implementadas para disminuir los contagios. Sin embargo, uno de los primeros efectos para la región se prevé que será el deterioro del comercio con los principales socios comerciales. La debilidad de las finanzas públicas también se verá agudizada por las necesidades de incrementar el gasto público ante la crisis de la pandemia de covid-19”, dice el informe.
Además, las prohibiciones de viaje, la interrupción del comercio internacional y a la caída de los precios de las acciones de las empresas multinacionales provocaría una reducción en la inversión extranjera que la región recibe del orden del 35%.
“En este contexto se prevé que el impacto económico se manifieste de manera diferenciada en los sectores de la economía, a corto plazo aquellas industrias relacionadas con los servicios recibirían en mayor medida las consecuencias”, destaca la Sieca.
Sin embargo, en el contexto de una crisis prolongada, las industrias tradicionales serían igualmente afectadas, lo anterior dependerá de cómo evolucionen las restricciones y del grado de propagación de la pandemia.
“Se prevé que las remesas a los países de América Latina y el Caribe disminuirán en un 19% (similar a la proyección de abril del Banco Mundial).
Esto representaría 6.000 millones de dólares. Sin embargo, las remesas se están recuperando en los últimos meses y el caso de Honduras la caída actual es de 2%, lejos del 20% proyectado.
De acuerdo con la información disponible al cierre de este informe, la mayoría de los países esperan un deterioro en la cuenta corriente de la balanza de pagos en 2020 en comparación con 2019.
No obstante, los resultados para el primer trimestre de 2020 muestran alguna evidencia de que el desbalance externo podría ser menos desfavorable debido tanto a los menores excesos de demanda que se observarían como resultado de la desaceleración en la actividad económica doméstica en cada uno de los países, así como de las menores presiones al alza en el precio de las materias primas.
Para el FMI, la contracción en la región CAPRD, sería de (-5.9%) y una recuperación gradual en 2021 (3.2%).