El Banco Mundial aprobó un préstamo de 400 millones de dólares a República Dominicana para “apoyar” las medidas del Gobierno orientadas a ampliar la transparencia, la rendición de cuentas y la eficiencia en el sector energético, según informó la oficina del organismo en Santo Domingo.
El monto también está destinado a aumentar el acceso a energía “confiable” y “asequible”, y respaldar la transición a fuentes de energía menos contaminantes y con bajas emisiones de carbono.
El préstamo es el segundo de su tipo y continuará respaldando reformas normativas e institucionales fundamentales en el sector energético del país, precisó el Banco Mundial. La primera operación de la serie se aprobó el 31 de marzo de 2022.
Desde 2014, el déficit generado por el sector eléctrico en República Dominicana representa entre el 1 y el 2,3 % del producto interno bruto (PIB), por lo que constituye una “considerable” carga fiscal para el Estado y un “obstáculo” para el desarrollo verde, resiliente e inclusivo, dijo la institución crediticia.
El BM afirmó que el país depende, principalmente, de combustibles fósiles importados para la generación de energía eléctrica, lo que contribuye a emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) más altas.
Las principales reformas que respalda el préstamo incluyen la creación de mecanismos eficaces para aumentar la eficiencia de las empresas de distribución; la implementación de sólidos incentivos para ampliar la integración de la energía renovable en la red eléctrica, y la descarbonización del sector del transporte.
También, la promoción de la aplicación de medidas de eficiencia energética para reducir las emisiones de GEI, y el fortalecimiento del código de la red para facilitar servicios eléctricos más confiables asequibles y resilientes.
Además, los fondos respaldarán los esfuerzos en curso para mejorar la sostenibilidad financiera del sector y reducir su carga fiscal a fin de generar importantes ahorros.
“El Gobierno de la República Dominicana ha adoptado medidas decisivas para comenzar a abordar los desafíos que enfrenta el país desde hace muchas décadas en el sector eléctrico”, dijo Alexandria Valerio, representante del Banco Mundial en la nación isleña.
“El Banco Mundial continuará respaldando estos esfuerzos para lograr un servicio eléctrico más confiable, que es fundamental para el crecimiento económico, la reducción de la pobreza y el bienestar de los habitantes del país”, agregó.