La Cámara de Comercio e Industria de Tegucigalpa (CCIT) manifestó sus dudas sobre la “tolerancia” policial en la toma de carreteras y quema de negocios en la capital de la república.
Las tomas han sido casi diarias en frente de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), en el bulevar Suyapa y el viernes de la semana pasada y el lunes anterior terminaron en quema de negocios, sin que existan detenidos ni se haya evitado los daños.
Rafael Medina, director ejecutivo de la CCIT, preguntó: “cómo es posible que no exista una planificación de acciones preventivas en los sitios en donde usualmente tiene lugar las protestas como los bulevares Suyapa, Fuerzas Armadas y en el centro de la capital. Tomando en cuenta que estos grupos divulgan con suficiente anticipación sus medidas de presión”.
Las acciones vandálicas, señaló, no solo se afectan a los propietarios de los establecimientos sino que a los trabajadores, proveedores de bienes y servicios, e incluso a los clientes que asisten a los mismos cuya seguridad se pone en precario.
“Es deber de los agentes policiales y militares proteger la seguridad de las familias, pero no he visto detenciones ni investigaciones cuando hay cámaras y vídeos de quienes participan en el vandalismo y saqueo”, apuntó.
A criterio de Medina, muchos encapuchados de las protestas, no son estudiantes universitarios sino que activistas políticos que termina refugiándose en el Alma Mater.
Lo inconcebible, agregó, es que se permite impunemente la toma de calles sin que exista ninguna respuesta de la autoridad.
“Cuando estos grupos afectan a la empresa privada solo se contribuye a debilitar la economía”, sentenció.