Las exportaciones de café al mercado internacional suman 331 millones de dólares en la actual cosecha 2022/2023 por la venta de 1.8 millones de quintales, informó el presidente de la Asociación de Exportadores de Café de Honduras (Adecafeh), Miguel Pon.
El exportador dijo que los datos son al 24 de febrero con una caída del 9% en volumen (-183.000 quintales), en relación al mismo periodo de la cosecha 2021/22.
“Los compradores en el extranjero están comprando café a un menor ritmo en términos de volumen, van comprando el café que se necesita, no compran inventarios grandes”, declaró.
Sin embargo, mantienen la expectativa de sacar todo el grano de café que han comprado a los productores. El precio internacional ha caído este año y por eso se debe monitorear lo que pasa en Brasil y Colombia que son los mayores productores de la región.
El pronóstico oficial de la cosecha del Instituto Hondureño del Café (Ihcafé) es de 7.2 millones de quintales, pero los exportadores proyectan 6.8 millones de quintales.
Precios a la baja
El precio internacional del café cerró la semana en $187.70 por quintal en el contrato “C” de la bolsa de Nueva York, que es el valor de referencia para los cafés arábigos suaves, como el hondureño. El contrato de mayo/23 operó en el rango estrecho de $185.90 hasta $190.00, “la más baja volatilidad en las últimas diez sesiones ($4.10)”.
Uno de los factores determinantes del movimiento de precios fue la presión que está teniendo el mercado de café arábica por la venta especulativa (liquidación por toma de ganancias), luego de alcanzar máximos de cuatro meses la semana pasada.
Otro factor que incidió fue el fortalecimiento del dólar tras la publicación de los datos macroeconómicos en Estados Unidos. En enero de 2023, la inflación en los bienes de consumo llegó a su punto más alto en seis meses.
La caída de los suministros también llama la atención en el mercado. “Los inventarios de café arábica certificado por la Bolsa Intercontinental (ICE) bajaron (…) hasta los 800,000 sacos de 60 kilos, un mínimo de siete semanas”.