El Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó la solicitud de asistencia financiera de emergencia para El Salvador de alrededor de $389 millones.
Esto representa (DEG 287,2 millones, 100 por ciento de la cuota) en el marco del Instrumento de Financiamiento Rápido (IFR) para ayudar al país a enfrentar la urgente necesidad de balanza de pagos derivada de la pandemia del coronavirus.
Además para dirigir fondos rápidamente a los sectores más afectados del país, incluido el sistema de salud. Esta asistencia financiera de emergencia representa el primer desembolso del FMI a El Salvador en más de tres décadas en el marco de un acuerdo de préstamo.
La institución apuntó que realiza un monitoreo para seguir la situación de El Salvador y agregó que “está dispuesto a brindar asesoría en materia de políticas y apoyo adicional según sea necesario”.
Ajuste fiscal para el 2021
“Es necesario ampliar temporalmente el déficit fiscal para preservar la salud pública y contener el impacto económico de la pandemia”, advierte el organismo.
“La estabilidad macroeconómica debe preservarse al permitir que estas medidas temporales concluyan el año entrante—una vez que la pandemia haya concluido—y al comprometerse a un ajuste fiscal gradual a partir del 2021”, amplió el FMI.
La institución expuso que esta “estrategia debería tener como objetivo un equilibrio fiscal primario del 3½ por ciento del PIB para finales de 2024 y colocar a la deuda pública sobre una trayectoria firmemente decreciente para alcanzar el 60 por ciento del PIB en 2030, asegurando el cumplimiento con la Ley de Responsabilidad Fiscal”.