Los precios de los productos y servicios siguen perdiendo fuerza en El Salvador. En abril pasado, el IPC (Índice de Precios al Consumo) fue del -0,1%, de forma que la inflación acumulada es del 0,9%.
La tasa de crecimiento interanual fue de 5,44%, la más baja desde octubre de 2021 cuando se situó en 5,49%, según los registros del Banco Central de Reserva (BCR).
Hay que destacar la subida del 0,7% de los precios de Hoteles, cafés y restaurantes, hasta situarse su tasa interanual en el 7,6%, que contrasta con el descenso de los precios de Transporte del -0,6%, y una variación interanual del 1,1%.
Una de las divisiones que más se resistía a ceder a la baja era la de alimentos y bebidas no alcohólicas, sin embargo, en abril presentó una variación mensual de -0,1%, y una interanual del 10,36%, menor si se compara con la obtenida en marzo, cuando fue de 11,62%.
Esta división es, por mucho, la que más contribuye a la inflación, al mantener un aumento a doble dígito desde abril del año pasado.
El Banco Central proyecta que la inflación en 2023, cierre en 3,3%, cuatro puntos abajo en relación con la tasa alcanzada en 2022, pero arriba a los valores que se tenían los primeros meses del 2021.