A partir del 1 de junio está en vigencia el cambio de la estructura de la estatal de energía hondureña al dar luz verde al funcionamiento del Operador del Sistema Eléctrico Nacional (ODS), ente encargado de los planes de expansión.
De acuerdo a la Ley General de la Industria Eléctrica (LGIE), pieza clave del plan de reestructuración del sistema energético que impulsa el Gabinete Económico, la ENEE se dividirá en tres empresas, habrá un operador y un ente regulador.
La Comisión Reguladora de Energía Eléctrica (CREE), el primer ente aprobado bajo la LGIE, confirmó que la ODS está en plena operación desde el primero de junio y ahora es el ente encargada de la “supervisión y control de las operaciones del Sistema Interconectado Nacional”.
Además de los planes de expansión que incluyen las futuras contrataciones de energía.
De acuerdo al comunicado de la CREE, la ODS es una ente privado sin fines de lucro que cuenta con representantes del mercado, es decir distribuidores, transmisores, generadores, consumidores y comercializadores del servicio.
Para ello se designaron cinco cargos en la Junta Directiva, tres de ellos fueron nombrados recientemente.
Los directivos de ODS
El presidente de la Junta Directiva de la ODS, es Rolando Castillo, en nombre de los distribuidores (ENEE). Castillo ha ocupado el cargo de Jefe de la División de Contratos, además de subgerente de Planificación y Gestión Comercial. Obtuvo su grado de Doctor en Ingeniería en Argentina.
En nombre de los transmisores (ENEE) fue nombrado Lucas Ramos, actual Gerente de Transmisión. Por los generadores (privados), la representación es de Hernán Castro, quien labora para la empresa LUFUSSA (Luz y Fuerza de San Lorenzo).
Falta el nombramiento del representante de los “consumidores calificados” y de los comercializadores.
Según la Ley General, la ODS será una entidad de capital público, privado o mixto, sin fines de lucro, con capacidad técnica para el desempeño de las funciones que le asigna la nueva ley y sus reglamentos.
Será independiente de todas las empresas de distribución, transmisión, comercialización o generación de energía eléctrica y de los consumidores calificados.
En asuntos de operación, el Operador del Sistema tendrá plena autoridad sobre los titulares de instalaciones que formen parte del sistema interconectado nacional, quienes deberán operar sus instalaciones siguiendo las órdenes emitidas por el ODS.
La apertura del Sector Eléctrico supone una reestructuración total de una estructura vertical, donde todas las actividades están agrupadas en una sola entidad (ENEE), a una estructura horizontal donde cada actividad está separada y es independiente.
Los principales actores de este nuevo esquema serán los generadores, las comercializadoras, los transmisores y los distribuidores de energía eléctrica.