Sólo el 44,6% de las hondureñas tuvieron participación en el mercado laboral en 2022
La política y la economía no van en la misma dirección. La llegada a la Presidencia de una mujer, permitió al país escalar 29 puestos en el Índice Global de Brecha de Género (GPE, por sus siglas en inglés), al pasar de la 82 a la 53. Sin embargo, ese gran salto no se reflejó en el mercado laboral.
Según el índice 2023 del Foro Económico Mundial, que sostiene que el mundo necesitará 131 años para eliminar la brecha de género, Honduras pasó de la posición 82 en 2021 a la 53 en 2022.
Tomando como base ese informe, el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) publicó un boletín del mercado laboral de género en el país estableciendo que esa mejora no refleja los resultados económicos para las mujeres.
Y es que hay 9.7 millones de habitantes y las mujeres representan el 53% de la población total. Pero su participación en el mercado de trabajo sigue siendo inferior a la de los hombres con 3.7 millones aptas para trabajar y sólo 1.7 millones activas.
“Un 44,6 % de la población total de mujeres en el país tuvo participación en el mercado laboral durante el 2022”, señala el informe presentado por la ex presidenta del Cohep, Aline Flores.
La tasa de participación tuvo una disminución de “4,1% si se compara con el 2021 que fue de 48,7%”
Mientras que en el caso de los hombres, su participación en el mercado laboral de 2023 fue de 75,5%, equivale a un incremento de 1,2%, siendo en 2021 de 74,3%.
El subempleo afecta a 808 mil 794 mujeres y a un millón 280 mil 118 hombres.
El Cohep advierte que hay un incrementó de la tasa de mujeres inactivas en el mercado laboral. “Es decir que hay más mujeres que ya no están trabajando, pero tampoco buscando trabajo activamente”, cita el boletín.
Asimismo, informó que los cinco sectores donde se concentran la participación de las mujeres en el mercado laboral son: comercio con 53%, manufactura con 49%, actividades en hogares 91%, hoteles y restaurantes con 80% y servicios con 65%.
Estas actividades son del sector terciario de la economía, donde se registran los menores ingresos.
Uno de los principales problemas es el acceso a la educación con muy poco apoyo familiar en el sector primario y secundario.
Las mujeres que no tienen estudios o solo tienen educación primaria tuvieron una “disminución significativa” en su participación en el mercado laboral, porque los puestos de trabajo que ocupan son más susceptibles a despidos, como empleos no calificados o empleos temporales.
En el caso de las mujeres que se gradúan de carreras de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas tienen una mejor oportunidad de trabajo y representan en la actualidad un 40% de su participación, apenas 2% menos que lo representan los hombres.
Además el desempleo afecta más a las mujeres, con una tasa casi el doble que la de los hombres: 12,9% frente al 6,2%.