El ministro de Seguridad, Gustavo Sánchez anunció que el toque de queda se suspende en el norte de Honduras a partir de mañana miércoles. La medida se aplica en las ciudades de San Pedro Sula y Choloma por los altos niveles de criminalidad.
“El toque de queda era una sola de las medidas para reducir la violencia, ha existido una baja de 74% de los hechos criminales”, dijo Sánchez.
El gobierno aprobó el toques de queda a finales de junio después de que más de 20 personas murieran durante un fin de semana en ataques separados en medio de una escalada de violencia en el país.
Específicamene el 24 de junio un grupo de hombres armados abrieron fuego en una sala de billar en un barrio Choloma, matando a 13 personas e hiriendo gravemente a otra, incluyendo sindicalistas de la maquila.
Ahora, asegura el oficial, existe una reducción en el índice de homicidios en el Valle de Sula, al tiempo que mencionó que unos 500 efectivos fueron agregados a la operación Fe y Esperanza en el norte de Honduras.
Sin embargo, destacó que el estado de excepción sigue en vigencia y mientras los números esperados no se logren apelarán para su extensión en lo que resta del año.
El toque de queda en San Pedro Sula duró unos 15 días ya que el sector empresarial solicitó la suspensión de la medida por las menores ventas del comercio y restaurantes en especial.